Ayer fue el día de la naturaleza y, debido al buen tiempo que está haciendo últimamente, apetece escaparse a la naturaleza a hacer deporte. Sin embargo, hay que tener en cuenta el cuidado de nuestra visión ya que, los rayos del sol pueden ser muy agresivos a determinadas horas del día.
La mejor forma de evitar esos riesgos es usar unas gafas de sol deportivas, adecuadas para este tipo de actividades físicas, además, nos ayudan a combatir mejor los factores externos de la atmósfera como pueden ser el polvo o el viento de la altitud. Por estos motivos debes cuidar tu vista.
La importancia de la elección de la montura:
Aconsejamos que elija una montura curva muy envolvente, con protectores laterales para una óptima protección. Las varillas regulables son una buena opción para el usuario, de esta forma, se garantiza la correcta sujección.
Tipos de lentes:
En el mercado existen diversos modelos de lentes para gafas de sol deportivas. Las más populares son:
Tintadas: Lentes “teñidas”. Dependiendo de la intensidad de aplicación reducen más o menos la luminosidad que llega al ojo. Ofrecen una reacción distinta ante la luz en función del color elegido.
Verde: Este tipo de matices permiten percibir los colores prácticamente sin alteraciones.
Marrón: Filtra las radiaciones azules y aumenta el contraste y la profundidad del campo. Este tipo de lentes son recomendables para los deportes al aire libre.
Gris: Las lentes grisáceas transmite, uniformemente, la luz a través del espectro y captura muy bien los colores naturales.
Amarillos: Este color en la lente nos aporta una mejora de constante en los días de condiciones meteorológicas no óptimas ya que la lente te ofrece una mejoría visual como reductora luminosidad.
Fotocromáticas:
Este efecto se puede conseguir aplicando películas de haluro o cloruro de plata o cobre. Con esto conseguimos que reaccionen ante la luz ultravioleta. El resultado es que se adaptan a los cambios de intensidad luminosa y, cuanta más luz hay, más se oscurecen. Las gafas que se construyen con este tipo de lentes son interesantísimas para actividades que combinan el paso por zonas soleadas y en sombra (la bicicleta de montaña o el senderismo por bosques, por ejemplo). Útiles para días de otoño-invierno, jornadas nubosas o actividades que se realizan al atardecer.